El Efecto De La Calidez Y La Fortaleza En El Liderazgo
Hace muchos años Maquiavelo se hizo la pregunta ¿el príncipe debe de ser amado o temido? A lo que él mismo respondió que lo ideal sería que fuera ambas cosas, pero que lograr ese balance era sumamente difícil. Años después, esta pregunta sigue siendo vigente para el liderazgo organizacional y las investigaciones nos demuestras que Maquiavelo no estaba tan equivocado, solo que algunas cosas han evolucionado.
La parte de que el líder debe ser amado ahora se refiere a su habilidad para generar confianza:
–¿Es mi líder alguien en quién puedo confiar?
– ¿Me hará daño?
– ¿Es una buena persona?
Y la parte de ser temido ahora se refiere a la capacidad del líder para infundir respeto con su credibilidad profesional:
-¿Esta persona es competente?
-¿Es capaz de afrontar los contratiempos?
-¿Nos puede llevar al éxito?
Como juzgamos a nuestros líderes
De acuerdo a los estudios de Amy Cuddy del Harvard Business School y a Susan Fiske de Princenton existen dos características que conforman el juicio social con el que evaluamos a nuestros líderes:
-La primera característica es la calidez: que se refiere a la habilidad del líder para conectar genuinamente con su equipo, de mostrarse accesible y cercano y de mostrar integridad con sus comportamientos.
-La segunda característica es la fortaleza: que se refiere a su capacidad para posicionarse como alguien fuerte, con agencia y competencia profesional.
Los líderes que son juzgados como competentes pero carentes de calidez a menudo provocan envidia en los demás, una emoción que involucra tanto respeto como resentimiento. Cuando respetamos a alguien, queremos cooperar o afiliarnos con él o ella, sin embargo la falta de calidez provoca que la gente no disfrute trabajar con ese líder de manera regular. Algo que se escucha regularmente de este tipo de líderes fuertes pero sin calidez es: “Es brillante o es muy competente, pero nadie quiere trabajar con él/ella”.
Por otro lado, las personas juzgadas como cálidas pero incompetentes tienden a provocar lástima, lo que también implica una mezcla de emociones: la compasión nos mueve a ayudar a aquellos por quienes sentimos lástima, pero nuestra falta de respeto por su competencia nos lleva en última instancia a aislarlos cuando estamos trabajando. Algo que se escucha regularmente de los líderes cálidos sin fortaleza es: “Es muy amable y géntil, pero no lo respetan en las juntas”.
Cuando un líder muestra un buen balance entre calidez y fortaleza la emoción que provoca en los demás es admiración. Este tipo de líderes se sienten como alguien cercano pero con la fortaleza necesaria de hacer que las cosas sucedan. Lo que se escucha regularmente de estos líderes con balance entre calidez y fortaleza es: “Es muy profesional o competente y además es buena persona”.
Es verdad que al evaluar a las personas notamos otros rasgos en las personas (como su desenvoltura, habilidades de comunicación, etc.) pero nada tiene tanta influencia en nuestra percepción como la calidez y la fortaleza. De hecho, la psicología contemporánea afirma que estas dos dimensiones explican más del 90% de la variación en las impresiones positivas o negativas que formamos de las personas que nos rodean.
Por último es importante mencionar que para lograr un impacto e influencia mayores, primero hay que mostrar calidez y después fortaleza.”. Todos los estudios concuerdan que la calidez es una base fundamental para generar confianza en las relaciones de trabajo, por eso primero debes de enfocarte en conectar con las personas y después enfocarte en los puntos que se necesitan para llevarlos al éxito. Es decir:
“Primero conecta y después lidera”.
-Amy Cuddy
Tips para proyectar calidez
-Usa el tono adecuado en tu voz
Busca un tono que sugiera que estás siendo honesto, humano y cercano con las personas, sin pretensiones ni adornos emocionales.
-Muestra empatía y entendimiento
“Antes que las personas decidan lo que piensan de tu mensaje, deciden qué es lo que piensan de ti”.
-Amy Cuddy
Si deseas que tus colegas te escuchen y estén de acuerdo contigo, primero busca algunos puntos que demuestren que estás de acuerdo con ellos.
-Valida los sentimientos
Reconoce el miedo y las preocupaciones de las personas cuando les hables, ya sea en reuniones formales o durante charlas informales y la gente estará más abierta a escucharte.
-Sonríe genuinamente.
Trata de conectar con momentos que te hagan sentir en el trabajo para que tu sonrisa sea natural. Evita a toda costa sonreír con las cejas levantadas. Esto sugiere que estás demasiado ansioso por complacer y agradar.
Tips para proyectar Fortaleza
-Siéntete al mando
Sentirse al mando y seguro se trata de conectarse con uno mismo. Y cuando estamos conectados con nosotros mismos, es mucho más fácil conectar con los demás.
-Párate derecho
“Párate derecho y date cuenta de quién eres, de que superas tus circunstancias”
-Maya Angelou
Es difícil exagerar la importancia de una buena postura para proyectar autoridad y la intención de ser tomado en serio.
-Manténte quieto
El movimiento constante o la inquietud durante una junta o presentación envían la señal de que no tienes el control. La quietud demuestra calma. Combina eso con una buena postura y lograrás lo que se conoce como aplomo, que transmite equilibrio y estabilidad, aspectos importantes de la presencia de un liderazgo creíble.
Estar de pie es una forma especialmente buena de proyectar fortaleza porque no interfiere con la calidez. Las mamás que constantemente les piden a sus hijos que se paren derechos y sonrían están en lo correcto: esta simple combinación es quizás la mejor manera de proyectar fuerza y calidez al mismo tiempo.
Referencias:
Cuddy, A. (2013) Connect then lead. HBR